Reclamas mi atención,
y la tienes,
y por ello nos encontramos
con intercambios perfectos.
Hemos sido entre asuntos
que nos hacen disfrutar
con pérdidas y hallazgos
que nos hacen adivinar
que la paz está en nosotros.
Nos necesitamos,
y lo sabemos ahora que prestamos
tranquilidad y espacios
de ternura infinita.
Envuelves mi corazón
con las sábanas de unos besos
que también genero para ti.
Creo que nada nos falta.
Juan T.
domingo, 11 de agosto de 2013
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